Es un honor presentar el Informe Anual de Resultados de Naciones Unidas en Honduras 2024, el primero en mi gestión como Coordinador Residente. Este informe refleja los avances del país en su camino hacia el desarrollo sostenible, así como el compromiso de Naciones Unidas en acompañar estos logros a través de un trabajo conjunto con el Gobierno, la sociedad civil, el sector privado, la cooperación internacional y otros socios clave.
Desde mi llegada a Honduras, he sido testigo del compromiso de las autoridades y contrapartes nacionales en la construcción de un país más próspero, inclusivo y resiliente. A pocos días de asumir mis funciones, el país enfrentó el impacto de la tormenta Sara, una emergencia a la que el Gobierno respondió de forma rápida y eficaz. Junto a la Red Humanitaria, la cual co-lideramos con la Secretaría de Gestión de Riesgos y Contingencias Nacionales (COPECO), complementamos las acciones de respuesta a la emergencia del Estado. Esta experiencia reafirmó nuestra convicción de que la prevención y la preparación ante emergencias son esenciales para reducir el impacto de fenómenos climáticos que, año tras año, afectan a las comunidades más vulnerables.
En 2024, acompañamos al Estado hondureño en esfuerzos fundamentales para fortalecer el Estado de derecho en un año clave para la democracia, con la mirada puesta en las elecciones de 2025. Asimismo, impulsamos acciones para mejorar el acceso a la justicia, fortalecer la participación ciudadana y avanzar en la prevención y atención de la violencia, en particular la violencia basada en género.
También contribuimos en importantes avances en la protección de poblaciones en situación de vulnerabilidad, incluyendo personas en movilidad, defensoras y defensores de derechos humanos, y la promoción de la cero discriminación, reducción de conflictos y violencia a través de esfuerzos de consolidación de la paz.
El desarrollo sostenible requiere transformaciones estructurales, y en este sentido, acompañamos al Gobierno central, los gobiernos locales, la sociedad civil y demás socios estratégicos en la promoción de una economía más inclusiva y una educación de calidad que brinde mejores oportunidades a la población. En salud, contribuimos a los avances significativos del país en el acceso a servicios esenciales, incluyendo salud sexual y reproductiva y la respuesta al VIH/SIDA.
Estos resultados no serían posibles sin el talento, el compromiso y la dedicación del equipo de Naciones Unidas en Honduras. A cada una y cada uno de ellos, incluyendo al equipo directivo, mi más profundo agradecimiento. Su trabajo diario, guiado por los valores de la organización, refleja nuestro firme compromiso con el bienestar de las personas hondureñas.
Este informe es una invitación a seguir avanzando juntas y juntos, con la convicción de que un futuro más justo, equitativo y sostenible para Honduras es posible.